La empresa certificada Arriva hace patente su compromiso con el planeta a través de su estrategia de sostenibilidad. Desde finales de febrero, ha dado un importante paso hacia la movilidad sostenible en la Comunidad de Madrid, con las primeras unidades de su flota eléctrica y la correspondiente infraestructura de carga para los servicios interurbanos.
Después de un mes, los resultados estimados muestran una reducción de más de 65 mil kg de CO2, con un total de 11.546 expediciones y 326.841 usuarios transportados. De esta manera se consigue disminuir significativamente la contaminación tanto atmosférica como acústica. El cambio ha sido notable y ya son más de 300.000 usuarios, en las más de 11.000 expediciones de este primer mes los que han comprobado la seguridad y diferencia de estos vehículos en su trayecto diario, y quienes han valorado la importancia de una movilidad más sostenible y respetuosa con el medio ambiente.
La entrada en servicio de la flota de autobuses 100% eléctricos es un paso más hacia la implementación de iniciativas que permitan a Arriva reducir su huella de carbono y mejorar la calidad del aire y de vida en las ciudades. Este proceso de electrificación se completará con la llegada de seis nuevos autobuses eléctricos en el mes de junio.
La iniciativa ha sido posible gracias a la obtención de una subvención de la Comunidad de Madrid a través de la Consejería de Transportes e Infraestructuras, mediante los fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia gestionados por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.
Arriva ostenta el sello de calidad Madrid Excelente desde 2001. Después de más de dos décadas, mantiene su compromiso para aportar soluciones de transporte público de viajeros de calidad, eficientes y sostenibles. Y es que la adopción de tecnologías limpias y renovables es fundamental para combatir el cambio climático y mejorar la calidad de vida de las personas.